Ayer me dijo el doctor que lo mío no tenía arreglo (mentira), y hoy para tratar de entender esta serenidad que me inunda me he ido al océano. Cuando salí del hielo y estaba secándome al solito, vi cómo empezaba a enterrarme en la playa. Que no! que mis dedos eran arena! y después todo el resto.
Empecé a resbalar hacia el mar mas una ráfaga me elevó a 3000 pies.
Ahora no sabía que hacer pero decidí instalar un vaguito en el corazón de daida, después de juan, tb viajé a extremadura y empecé por papá y mamá y seguí con el resto de la familia, uy! ya me queda poco para los amigos! a estos solo un granito les basta y así por todo el mundo hasta q me agoté y no me olvidé de nadie!
No quiero ser recordada que eso duele, por eso dejé de escribir hace tiempo, aunq haya vuelto a las andadas. Pero esto de estar calentita en el corazón de la gente me gusta.
Cuando no puedo ir, me gusta bañarme en la playa el 24, pero con lo que no contaba era con quedarme dormida este año, es la primera vez que me pasa.
FELIZ NAVIDAD
2 comentarios:
Ole con ole!
Muy buena... muy buena.
Me has hecho recordar el océano... cojo mi apellido. P´allá que voy!
que no pare la racha, ana, Sigue escribiendo. Ahora ya sabes que tienes lectores y no puedes parar
un abrazo
florián
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